42-MALEFICOS PLANES...

Eso no era sexo. Eso era otra cosa. Un maléfico plan para provocar una fusión nuclear. Dos cuerpos atómicos. Radiactivos. Provocadores de muertes a medio-largo plazo. Dos novas fusionando sus luces blancas. Fuegos artificiales implosionando. Gritos mudos de placer. Pretéritos pluscuamperfectos en do bemol y demás estupideces sin sentido que suenan tan bien para describir un acto intranatural; donde la energía de uno electrifico al otro y los rayos gamma del otro fluerescendiaron el cuerpo de uno. Llamas verdes y azules de pasion. Chispas sobre el colchón. Llamas que no queman porque tu cuerpo arde a temperatura mayor. Pupilas blancas como la de los ciegos de las películas. Clavando sus miradas en el infinito. Atravesado el cuerpo etéreo de la pareja del duo que canta al unísono.

41-MEDUSAS DEL AIRE

Odio a las medusas de aire...aunque puede que me parezca a ellas mas de lo que quisiera.
Ahí van, sin rumbo fijo, casi sin pensar. Seguramente sin pensar.
Siguen las corrientes de aire ascendente y descendente. Como bolsas de plástico de la compra. Haciendo visibles los remolinos cuando giran sin parar.
Siempre tan desconfiadas. Siempre a la defensiva.
Cuando alguien se acerca le picamos. Le envenenamos con nuestros tóxicos tentáculos casi invisibles para la vista humana.
Y nadie puede decir nada, al fin al cabo lo hice sin querer. Es mi excusa perfecta. Fue el viento el que me llevo a ti. Yo solo me deje llevar.
Solo me deje llevar.

40-EL PESO DEL MUNDO

Nadie lo sabía.
El cruzaba la calle como un cualquiera. Leía libros. A veces el periódico.
Ocultaba sus problemas como tu y como cualquiera.
Tomaba café. Aun a sabiendas de que el torrefacto es muy perjudicial.
Viajaba. Miraba las estrellas. Era un consumidor como cualquiera.
No era muy destacable. Delgadito. Estatura normal. Moreno...uno más.
Quién lo iba a saber? El llevaba el peso del mundo.
El lo hacía girar. Sus vientos. Mareas. Estaciones.
Y durante un momento todo se detuvo. Todo.
Y entonces todo se congelo. Pause. Pause. Pause.
Y el Play no funcionaba. Y él sin pilas. Cuerpo helado. Temblor.
Su mundo se detuvo. Que más da en que estación.
Cuerpo tenso. Sudor frío. Eternidad. Maldita eternidad.
Estiró su brazo. Vista desenfocada. Zumo.
... ... ... ... ... ... ... ... ... ...Y Play...pero a que precio?
Cuantas veces habrá rozado la linea?
No la habrá cruzado ya?

39-MUERTO

Mi cuerpo helado.
Me abrigo y no mejoro. Vaho de mi boca simulando el humo de un dragón.
Por mis venas ya no circula sangre. Bombeo mercurio.
Mi cuerpo está frío. Mi cuerpo esta muerto.
Soy un vampiro. No un vampiro moderno con tupé y trajeado.
No soy un vampiro que hipnotiza con la mirada. No enamoro. No brillo a la luz del sol.
Soy un muerto dejado de la mano de dios. Despreocupado.
Desarreglado. Sin afeitar. Sin peinar. Sin aspiración. Sin expiración.
Me alimento de vuestro calor. No bebo de vuestra yugular.
Absorbo vuestra vida con mi fuerza gravitatoria.
No os percatáis. Nunca os daríais cuenta.
Estoy en lo mas alto de la pirámide alimenticia.
Y solo deseo llorar.

38-ESNIEVE

Poseía una mirada tan fría que lloraba copos de nieve.
Pero no era un frío desolador. No era un frío malvado. Ni distante. No era un frío corrompido. No era un frío que te helase los huesos.
Mas bien es el frío que te refresca del calor del verano. El frío puro. El de la montaña. El que te sana. El que aligera tu cuerpo en cada bocanada.
Era el frío con el que ves tu propio vaho y te sientes vivo. El frío con el que traspasas el calor de tus manos a su nuca.
Era un frío sano. Curativo.
El frío que solo la inocencia de una mirada inocente puede transmitir

37-LA MARIMORENA

Todo era mas sencillo antes pero conmigo fui a topar...y se monto la marimorena

36-ASOCIACIÓN FRIKI VS ENMASCARADO

Una enorme mano a la que se le unían cinco gordos dedos acariciaba el pelaje blanco de un gato. Asfixiado cada uno de los dedos por un anillo cada vez mas prieto. Mas aparatoso. Mas oro. Mas caro. Como si fuesen trofeos adquiridos año tras año en una carrera solo ascendente. Como si el ultimo de sus anillos fuese el certificado de su ultimo triunfo. Su licenciatura. El premio de la NBA. El trío con dos lesbianas, japonesas, hermanas y con el pelo azul y rosa.
Pero este ultimo premio esta claro que no podía ser verdad. Este personaje se trata de un friki. Uno de esos frikis gordos que han logrado implantar, a base de muchas horas recostado, su figura en el sofá orejero. Carcomido. Desgastado. Con manchas de lo que puede ser sudor acumulado.
Su infinito cuerpo esta siendo iluminado por una serie de monitores. Dispuestos uno al lado del otro. Y otro sobre otro. Y al lado otro donde bajo el se haya otro. Y así podemos calcular un total de 8 monitores. Con tendencia a tono verde, como en las pelis. Y esas rayas que bajan. Indiscutible señal de que son vídeos grabados de videocámaras.
El gordo con la camiseta de linterna verde y su gato, también gordo, blanco, escala 1:10 del dueño visualizan los vídeos mientras se ceban a palomitas.

- Odio a ese tipo. Lo odio tanto que mi chakra se vuelve rojo y me salen las cuatro colas y...y...y

Rojo, lo que se dice rojo, el chakra no se sabe...pero su cara es un tomate.
Le saltan palomitas de la boca. Ya masticadas y húmedas. Alguna se pega al monitor cayendo unos milímetros y amarrandose con uñas y dientes al cristal para no caer por el precipicio hasta la moqueta del suelo.

- Algún día le venceré. Algún día. Mis esbirros te liquidaran maldito enmascarado!!!


Y en las pantallas. Burlonas. Entre lineas que caen y tendencias a verdes. Entre el ruido digital. Entre todas esas cosas se ven a distintos súper villanos disfrazados con pijamas de colores. Tumbados en el suelo. Inconscientes...tal vez haciendose los muertos. Todos sabemos de las tretas de supervivencia que utilizan los frikis. Y, de entre los disfrazados, destaca solo una vertical. Enmascarado. Con una sonrisa infinita. Como la del gato de Alicia. Que mira a la cámara torciendo la cabeza y alargando su brazo, en el extremo del mismo y tan próximo al objetivo que su figura queda tapada por la L que forman los dedos de su mano derecha.

El final ya lo sabéis. Gruñidos, gritos y algún "volveré" que pierde intensidad para dar un efecto de huida. Aunque el gordo no se ha movido del sofá...faltaría mas